Breaking Bad: La televisión también es arte

Lo primero que me viene a la mente después de leer "La televisión también es arte" es un... Vale, ¿y telecinco qué? Pues está claro que el panorama televisivo en España deja mucho que desear, por eso mi tv es mi ordenador y mis canales son series.ly seriesyonkis y el oso hormiguero. Dentro de este abanico de series (que es de lo que se trata en este blog) tenemos un catálogo interminable que para mí sin duda está encabezado por la genial, maravillosa, inigualable, alucinante, sublime... BREAKING BAD

(*Este post no tiene ningún Spoiler más allá del enlace  y unas breves trazas del argumento).

Son muchas las cosas que hacen encumbrar esta serie. Empezando por su argumento, pasando por las actuaciones, el apartado técnico, los secundarios, la evolución de la historia... Solo con leer el punto de partida de la serie uno se da cuenta que intenta hacer las cosas de un modo diferente: Nuestro protagonista Walter White es un  profesor de instituto (y un gran químico), padre de Walter Jr (discapacitado) y marido de Skyler (embarazada). Su posición económica pésima le lleva además a trabajar a un lavado de coches. Cuando su vida no podía ir a peor, le diagnostican un cáncer pulmonar terminal. Desesperado por dejar a su familia en mejor posición económica y poder pagar su tratamiento, decide montar un laboratorio de metanfetamina con un antiguo estudiante Jesse Pinkman  ya metido en el mundillo de las drogas del barrio.

¿Original? Lo sorprendente es que nos presentan la historia y los personajes de forma muy real. Un argumento que podría ser estrafalario, surrealista, se convierte en algo cercano y casi lógico, con unos momentos delirantes, cargados de humor negro (el mejor ejemplo son los primeros 5 min de la serie). A que nos  creamos toda esta historia ayuda, y mucho, la actuación de dos monstruos de la interpretación, premiados infinitas veces por esta serie: Bryan Cranston (lo conoceréis como el padre de Malcom!) y Aaron Paul. Que se superan temporada a temporada dejándonos momentos tan brutales como por ejemplo este I am the one who knocks!

Pero un buen argumento, actores y apartado técnico podemos verlo en más series. Entonces, ¿qué hace tan jodidamente buena a Breaking Bad? Uno de los puntos que más la caracteriza, es su oscuridad, tenemos un protagonista que según avanza la serie se vuelve más y más oscuro. Explora ese lado oculto que tenemos, esos límites que no tienen vuelta atrás, pasa de la desesperación por ayudar a sus seres queridos, a explorar la emoción y adrenalina que supone ser travieso e incluso, más adelante, vivir y disfrutar siendo un auténtico hijo de puta, con excentricidades dignas de una mente retorcida. Esta evolución de Walter White, nuestro protagonista, es extensiva a toda la serie. Va perfilando su carácter, su humor, sus silencios, su acción, sus diálogos... se va puliendo poco a poco siempre mejorando, cada capítulo, cada temporada. Si es la única serie a la que en cuatro temporadas no tengo absolutamente nada que reprocharle, por algo será... ¿no?

Otro elemento genial de esta serie son sin duda los silencios: infinitos silencios con dos personajes en escena que pasan como si fueran un segundo, haciéndote estar atento a cada gesto, respiración y mirada.  Contar muchísimo, en apariencia, con tan poco. La serie también se permite ciertas licencias, para honrar a sus personajes, o para remarcar una situación cómica, que no hacen más que remarcar lo reales y llenos de matices que son éstos. Por si fuera poco esta serie nos deja uno de los mejores "villanos" (por llamarle algo) de la televisión... No hace falta ni decir su nombre, los que hayáis visto la serie sabéis de quién hablo y los que no... que hacéis leyendo esta mierda, ¡poned el piloto! 

Para acabar, os diré que ya hay confirmación de que la serie tendrá una quinta y última temporada de 16 capítulos, lo que implica que tendrá un final planeado y coherente con las cuatro anteriores. El final de la cuarta temporada es épico... y la quinta no será menos. Es una serie que te enganchará, hará que quieras ver un capítulo tras otro, y te hará aprender a distinguir un buen actor de uno mediocre, una buena historia de una resultona, una obra de arte de todo lo demás.

¡Un saludo!

P.D. Por supuesto, ni se os ocurra verla doblada. Siempre en V.O., sino se pierde una de las mayores virtudes de la serie: las interpretaciones.